Cada vez que llega esta semana grande dentro de nuestro
calendario, ya sea por la devoción o por tener unos días de vacaciones, vemos
en numerosas ocasiones en televisión imágenes de las diferentes procesiones que
salen a la calle en diferentes puntos geográficos de España. Sin duda es
Andalucía la comunidad que más horas consigue mostrarse ante todo el país. Y
Sevilla, dentro de las provincias andaluzas, la que obtiene mayor protagonismo.
Lo cierto es que la Semana Santa de Sevilla (y otras grandes ciudades como
Málaga) es preciosa y hay que conocerla, pero también es muy cansada. Hay que
estudiar muy bien los itinerarios y los horarios de cada hermandad o ir guiado
por alguien que lo haga por ti para poder disfrutarla realmente. De lo
contrario, puedes pasar más de una hora de pie esperando a que pase el Cristo o
el palio, lo que te deja destrozados pies y riñones.
Por eso propongo a Huelva como alternativa. Y os voy a
explicar porqué es atractiva para el visitante y el turista:
1. La ciudad
se viste de gala. Se observa en la gente, en los balcones, en el despliegue de medios de
comunicación, en la alegría de la gente que se reencuentra con amigos que no ve
hace meses, en el respeto hacia los pasos cuando pasan por delante, en la
emoción incontrolada de los devotos cuando ven pasar las imágenes, en la
elegancia y la amabilidad de la gente de Huelva… Es todo tan especial que la
única forma de saberlo es vivirlo, seas o no seas creyente. Te hablo desde el
punto de vista turístico.
2. Existe un
gran ambiente en toda la ciudad sin llegar a haber acumulaciones de gente
que no permitan andar con normalidad. Eso sí, si deseas ir rápido a ver alguna
procesión no lo hagas por carrera oficial, que sí puede haber “atascos”.
3. Casi todos los días salen tres hermandades y
cada uno con dos pasos de media. El
visitante o el turista puede ver todos los pasos en pocas horas si lo desea
ya que no son demasiados y suelen estar cercanos en distancia. Es una Semana
Santa muy cómoda de ver.
4. Cómo bailan los costaleros a los pasos. Realmente es algo que emociona a cualquiera al ritmo de las marchas. La entrada en Carrera Oficial y el paso por el ayuntamiento son algunos de los puntos claves para abrir los cinco sentidos.
5. Las
imágenes que aparecen en los pasos son similares a los de Sevilla, debido a
que los escultores han trabajado para éstas y otras provincias.
6. Si te
gustan las bandas de música, ten por seguro que en cualquier calle podrás
acercarte a primera fila y disfrutar de sus marchas como si estuvieras dentro.
Es algo que pone los bellos de punta. Hay que tener en cuenta que por Huelva
pasan las mejores bandas de dentro y fuera de la provincia.
7. Los bares
y restaurantes son parte fundamental de la fiesta. El hecho de que no haya
un gran número de procesiones permite hacer una, dos o las paradas que hagan
falta para tomarse una tapita en cualquier bar mientras llega el siguiente
paso. Uno puede perfectamente, en un intervalo de 4 horas (y menos también), verlos
todos y cenar tranquilamente. Depende de la cantidad de amigos y conocidos con
los que te pares a hablar por las calles.
8. Si eres
amante de la fotografía, podrás hacer mil fotos gracias a la accesibilidad
a los pasos, a los costaleros, a los penitentes, a las bandas de música o a las
iglesias. Puede ser tu mejor recuerdo de nuestra Semana Santa.
Me llama la atención
que la Semana Santa de Huelva siga siendo aún desconocida en el país y que gente de la propia provincia aún no
conozca la de su capital y sí la de Sevilla. Desde aquí os animo a que
reservéis un día para venir a vivirla y mezclaros con las gentes. Si me lo
permitís, os aconsejo el miércoles Santo, posiblemente el día grande en Huelva.
Fijaros que os he hablado de Semana Santa sin nombrar a
ningún Cristo, ninguna Virgen ni ninguna hermandad. Seamos o no devotos de esta
semana grande, es sin duda un evento, como poco, social que atrae a muchísima
gente. Eso sí, si deseas conocer más sobre nuestra Semana Santa, aquí te dejo
algunos enlaces a webs cofrades que seguro sabrán explicar su historia, su
sentimiento y su fe mejor que yo.
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