Hace unos días tuve el placer de asistir a
Flamencondado, un evento cultural organizado por la empresa onubense Sentire
donde el vino, la gastronomía y el flamenco se disputan el protagonismo a
partes iguales en un emplazamiento realmente típico y añejo, Bodegas Andrade.
Acudí con mi esposa a quien le hice este regalo con motivo de una emotiva celebración.
El evento consta de 5 tipos de vino, 5 tapas y 5 palos de flamenco durante unas
dos horas y media empapados de cultura andaluza que pasan volando.
Flamencondado, comienza con una breve
explicación por parte de uno de los socios de esta empresa de Bollullos par del
Condado sobre las virtudes del vino, la gastronomía onubense y su fusión con el
flamenco. Sentados en una mesa y sillas de feria y con una luz tenue, las cerca
de 30 personas que completamos el aforo de la bodega en un ambiente íntimo,
pudimos degustar el primer vino y la primera tapa con el primer palo del
flamenco, en una completa armonía. A cada tapa le acompañaba un vino acorde con
ella y en conjunción con ambos un palo del flamenco que expresaba un
sentimiento el consonancia con lo que degustábamos. Realmente me pareció una
experiencia innovadora.
El cuadro flamenco lo componían un guitarra,
un cantaor y una bailaora, que sin duda captaron toda la atención de los allí
presentes haciéndonos disfrutar por partida triple al mismo tiempo: arte
andaluz, gastronomía y vino. O mejor dicho, por partida cuádruple, porque no me
puedo olvidar de la inmejorable compañía de mi mujer y de algunos amigos que
como nosotros supimos aprovechar la ocasión de vivir una nueva experiencia,
experiencias Sentire.
Pero no sólo es Flamencondado, que actualmente
puede ser contratado para grupos (una gran opción para una comida de empresa o
un regalo para nuestros padres o hermanos). Sentire es mucho más. El Vinotren
es otra gran iniciativa. Se trata de llevar el tren turístico, que todos
conocemos por recorrer multitud de ciudades españolas, a los viñedos y campos
de Bollullos, antesala de Doñana. Por supuesto, este paseo rodeado de
naturaleza va acompañado de la cata de vinos y degustación de productos típicos
de Huelva. Sin duda, otra experiencia inigualable.
Otras opciones son las veladas en una casa
mudéjar que a nadie deja indiferente y las noches en el Castillo de Niebla. Un
amplio abanico de posibilidades culturales que esta empresa onubense que apenas
acaba de nacer ha puesto a disposición de onubenses, españoles y sobre todo el
resto del mundo que desea visitar este rinconcito de España y no quiere irse
sin conocer en profundidad la cultura andaluza. Su principal virtud es que sus
eventos están dirigidos a todos los públicos. No es algo dirigido
exclusivamente a turistas, ni tampoco a visitantes, ni siquiera a los propios
onubenses. Su apuesta es tan fresca e innovadora que es digna de ser vivida por
todos los públicos.
Realmente hacen falta muchas más empresas
como Sentire. Empresas que apuesten por los recursos turísticos de la provincia
y que sean capaces de atraer visitantes y turistas de todos los rincones del
mundo engrandeciendo esta bendita provincia que tanto y tanto tiene que
ofrecer. “Huelva, la gran desconocida”, como me gusta llamarla. A escasos 30
minutos de Sevilla por carretera, Sentire. A un paso de Doñana y en pleno
corazón del Condado, comarca con denominación de origen, en Bollullos par del
Condado. Algo está cambiando en Huelva.
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